Se produce un accidente de tráfico, en el que resulta daños en los vehículos y la pérdida de la carga. Se repercute contra el transportista el importe de la carga y éste inicia acciones legales.
El accidente se produjo por la mala estiba de la carga y el abogado deduce demanda contra una empresa que no figuraba en la carta de porte y contra el operador del transporte, pero no contra el expedidor y cargador responsable de la estiba.
Así, dice la propia sentencia “no se explica por qué la actora no ha dirigido su demanda contra el cargador, cuando la ley claramente imputa a éste tanto el daño en sí como el lucro cesante por la paralización por lo que procede la íntegra desestimación de la demanda con imposición de costas”.
Las costas las asumió la propia aseguradora que designó el letrado para formular la reclamación y nosotros iniciamos acción contra dicho letrado y su aseguradora.
No se podía iniciar una acción contra el cargador por estar prescriba y la aseguradora asumió la responsabilidad si bien su oferta se limitaba a la cantidad de 8.000 € y se firmó finalmente un acuerdo transaccional por importe de 22.000 €.
